King Cake

Ya estamos con nuestro desafío en la cocina número 29 que viene, este 20 de enero de la mano de Carolina del blog, Tomillo, laurel y otras cosas de comer. Nos propone un desafío dulce y muy colorido, un desafío que nos augura fiesta, diversión y una tradición que aquí en las Islas vivimos  desde el más pequeño de la familia hasta el abuelo y es; el carnaval.

Para explicar un poquito más sobre este sabroso roscón Rey, que sólo con ver su nombre; King cake ya nos imaginámos cómo estará;  vamos con una breve pincelada sobre sus historia. Es una receta con tradición y nos lleva lejos,  nada más y nada menos que a Nueva Orleans (Louisiana) y a su Martes Gordo o Mardi Gras que es como se le llama al desfile  que tiene lugar el martes de Carnaval en este Estado. Así nuestro roscón es propiamente carnavalero. Los típicos colores de esta fiesta  y del postre que nos ocupa tienen un significado determinado y  muy especial; amarillo significa poder, el púrpura justicia y el verde fe. Si buscan en Internet fotos sobre este carnaval es una maravilla ver tanto colorido. Y ahora vamos con la receta que es muy parecida al típico roscón de reyes.

               

Ingredientes:

600 gr. de harina de fuerza

20 gr. de levadura fresca

100 gr. de azúcar

3 huevos

100 gr. de mantequilla

La piel de un limón y naranja pequeños

100 gr. de agua tibia

100 gr. de leche  tibia

1 cucharadita de sal

Un pelín de nuez moscada y matalahúva (esta última no la lleva la receta original, pero es tradicional aquí ponerla en nuestras roscas y roscones)   

Azúcar coloreado para decoración

Glaseado (azúcar glas  y leche)

Preparación:

En thermomix, ponemos mezclamos la piel de la naranja y el limón con el azúcar y picamos velocidad 5-10 durante 10 segundos aproximadamente. Incorporamos el agua, la leche, los huevos, la mantequilla, la harina y levadura, la sal y la nuez moscada y la matalahúva, mezclamos un poco, a velocidad 6 unos 30 segundos. Seguidamente, velocidad espiga 3 minutos. Dejamos reposar en el mismo vaso  hasta que suba (1 hora aproximadamente).

Una vez pasado este tiempo sacamos del vaso y enharinamos una superficie, damos forma de rosca o roscón, y dejamos reposar hasta que vuelva a crecer. Precalentamos el horno, pincelamos con huevo batido y ponemos el roscón a 180 º C unos 30 minutos aproximadamente, dependiendo de cada horno. Vamos haciendo el glaseado con azúcar y leche dándole la consistencia que deseemos.

Una vez doradito, sacamos del horno y dejamos enfriar. Bañamos con el glaseado y decoramos con el azúcar coloreado.

Nos quedó un roscón muy vistoso, dulce y colorido, una mezcla un tanto explosiva para una dieta sana y equilibrada, así que después de las pertinentes fotos, todo este "sobrante" fue retirado del roscón que en cuanto a sabor no tenía nada que envidiarle al de reyes de toda la vida.

Y ahora si quieren ver el resto de recetas de mis compañeros no tienen más que pinchar aquí.